Mireia Mollà critica que se esté haciendo este gasto absurdo y mientras el tranvía siga sin funcionar
La diputada de Compromís Mireia Mollà ha reclamado hoy que “se suprima el suministro eléctrico de la línea 2 del Tram mientras este servicio permanezca paralizado, ya que se trata de un gasto inútil” y ha señalado que “este hecho evidencia una falta de control dentro de la Conselleria de Infraestructuras”.
Mollà ha explicado que “actualmente se encuentran en funcionamiento los semáforos, la catenaria se mantiene en tensión y está encendida toda la señalización del Tram, una situación totalmente incomprensible teniendo en cuenta que esta línea no ha sido puesta en marcha todavía, a pesar de haber sido inaugurada en varias ocasiones por la Generalitat”.
“Sólo con 200 señalizaciones luminosas, con una media de 12 vatios por cada una, se estarían consumiendo al año 21.024 kilovatios hora (kWh), un gasto de dinero y de electricidad que podríamos ahorrarnos suprimiendo el suministro eléctrico de las señales”, ha apuntado la diputada de Compromís.
Mireia Mollà ha indicado que “la situación por la que pasa la línea 2 del Tram es un total despropósito, pues permanece inactiva a pesar de estar la infraestructura completada y a punto para empezar a funcionar”. “El empeño de la Generalitat en privatizar esta línea ha provocado que llevemos meses de retraso en su funcionamiento, cuando los mismos trabajadores de FGV podrían hacerse cargo de ella y, en este sentido, volvemos a reclamar su gestión pública”, ha añadido.
Por su parte, el portavoz de Compromís per Alacant, Tomàs Mestre, ha indicado que “la ciudad necesita la puesta en marcha urgente de este servicio, puesto que es la solución para aligerar el tráfico de vehículos particulares que hay en el tramo entre Alicante, Sant Vicent del Raspeig y la Universitat d’Alacant y resolver la saturación de la línea 24 del autobús que da servicio a esta zona”.
“Está previsto que la línea 2 del Tram haga descender en un 22% el tráfico de vehículos privados y permita el mejor funcionamiento del resto de transporte públicos, una medida esencial para las más de 25.000 personas que circulan diariamente por aquí”, ha asegurado Mestre, que ha añadido que “es vergonzoso que los ayuntamientos de Alicante y San Vicente no apoyen la gestión pública del servicio e impidan así que esté en funcionamiento en poco tiempo”.