La diputada Mireia Mollà ha pedido hoy en el pleno de Les Corts Valencianes la puesta en marcha de una comisión de investigación para aclarar las presuntas irregularidades que se han producido en la redacción del PGOU de Alicante, pero la medida ha sido rechazada con los votos del grupo parlamentario popular, que se ha negado a abrir este proceso.

Mireia Mollà ha explicado la necesidad de depurar “responsabilidades políticas” sobre esta rama del caso Brugal que en la actualidad está siendo investigado por la justicia y por el que la Fiscalía Anticorrupción considera que la alcaldesa de Alicante y diputada autonómica, Sonia Castedo, y su antecesor y también diputado en Les Corts, Luis Díaz Alperi, habrían podido cometer los delitos de soborno, información privilegiada y tráfico de influencias para beneficiar al constructor Enrique Ortiz en la elaboración del PGOU de Alicante.

La diputada de Compromís ha destacado que “los informes policiales recogen centenares de conversaciones donde se evidencia cómo se intercambian informaciones valiosas sobre el PGOU” y también ha señalado que “Papa Noel de apellido Ortiz se dedicaba a hacer regalos a diestro y siniestro, como el Mini que le regaló a Castedo, viajes, paseos en yate para ver partidos de fútbol, pisos para las hijas de Ripoll y viajes en Creta para Alperi”, por lo que ha preguntado que “a qué intereses correspondían estos regalos”.

Mollà –a la que Ortiz pide 150.000 euros para decirle que es el empresario más impregnado de casos de corrupción de España- se ha referido también a las informaciones policiales que aseguran que el bufete de abogados del hermano de Castedo era el que elaboraba las alegaciones al PGOU y era, al mismo tiempo, el encargado de contestarlas y ha asegurado que “para todos los que tenemos un mínimo de sentido, el PGOU está impregnado de casos de corrupción”.

La diputada autonómica ha preguntado que “si habido motivos para abrir comisiones por otros escándalos como el de la CAM o el de Emarsa, ¿por qué en este caso el PP no tiene vergüenza y lo abre?” y ha asegurado que “hay responsables políticos en este caso y encima tienen la cara de sentar aquí y estoy harta de que el PP utilice esta institución para protegerse judicialmente”.

Mireia Mollà ha pedido “argumentos que expliquen las razones de por qué el PP no quiere depurar responsabilidades políticas en este caso” y ha demandado a Castedo que diga “qué amistades tiene, qué precio tiene su silencio y cuánto nos han costado sus amistades peligrosas”. La diputada de Compromís ha solicitado, además, que “se paralice el PGOU hasta que se resuelva hasta qué punto está impregnado de las voluntades, los vicios y de los amigos que son más que un tesoro”.